Es esta semana renegué de muchas cosas:
-De mi estado "cómodo" de quedarme esperando respuestas de un comitente y salir a buscar otros posibles clientes.
-De haber tenido que ir a Cba. el Miercoles sin tener ganas.
-De haber tenido que ir a Cba. el Jueves temprano con la intención de que me cambiaran la fecha de defenza del proyecto de tesis Haber recibido un NO como respuesta. Haberme vuelto a casa para preparar la presentación para el Viernes y por ende haber faltado al grupo.
-De haber ido a Cba. el Viernes temprano, estar una hora y media sentado fuera del curso para que me dieran la feliz noticia de que mi defenza la hacia la semana que viene.
-Y renegué también el Martes cuando chatié con esa persona y no pudo entender que no podiamos juntarnos a charlar por todo esto.
-Y vuelvo a renegar hoy, cuando recibo un llamado intimidandome por haber publicado algo que en parte tiene razón (no puedo publicar una foto sin el concentimiento de esa persona) pero por otro, no ofendía, ni decia absolutamente nada ofencibo en dicha imagen.
-Reniego día a día de mi, de yo, de renegar por cosas que a veces, me las busco y otras no, de renegar y saturar mi cabeza renegando.
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Odio ser un maldito sentimental, odio que reniego de casi todo, odio cuando existen cosas que me duelen y cuando un mensaje no se entiende...
Odio y reniego de mi sinceridad, porque me propuse no mentir más...
Odio de las cosas que sin querer hacen mal...
Me odio porque al parecer, de una forma u otra, siempre busco que me maltraten, que me denigren, que me menosprecien, que me tengan bronca y/u odio...
Odio mi vida, odio el fracaso, odio el masoquista que tengo dentro, odio mi tendencia autodestructiva y odio haberme enamorado alguna vez de vos, odio conocerte tanto, odio saber que me odio por lo que soy, por lo que digo y por lo que hago.
Odio odiarme.
Odio lo que duele...
No quiero descubrir más cosas de mi, seguir descibriendo que no me banco ni a mi mismo.
Tengo 21 años y desde hace mucho tiempo que la vengo peliando mano a mano a mi propia existencia para no causarles dolor a los que SI me quieren.
En definitiva, odio tener este MAMBO en la cabeza y estar convencido que ni el mejor psicólogo del mundo puede ayudarme a resolverlo.
Odio mi maldita autoestima.
Odio llorar y lo hago muy seguido.
Odio mi historia, mi pasado y mucho más odio el futuro que me puede llegar a deparar para mi vida con semejante quilombo en el coco...
Algunos pensarán que soy un pesimista o un extremista, pero esto es todo lo que tengo día a día en la mente, y es esto contra lo que lucho. Una batalla contra mi mismo producto, creo, de mi tendencia autodestructiva.
Salu2. Magoo.